Los signos vitales son todas las constantes que permiten valorar el estado fisiológico del cuerpo. Estas constantes se mantienen por medio de la homeostasis (equilibrio corporal).
Los signos vitales nos permiten conocer si nuestro cuerpo está funcionando bien y por consiguiente, cuando estos se alteran es un signo de advertencia de que algo no ésta bien y debemos recurrir al médico.
Los principales signos vitales son: temperatura, frecuencia respiratoria, frecuencia cardíaca (pulso), presión arterial.
Temperatura:

La temperatura corporal representa el calor producido por el cuerpo. Esta temperatura es considerada normal en un rango de 36°C, a 37°C, siendo hipotermia cuando está por debajo de 36°C, y fiebre o hipertermia cuando supera los 37°C.
La temperatura se mide con un termómetro, los hay digital y de mercurio, los digitales son ideales para personas que no sepan manejar el termómetro de mercurio.
La presencia de fiebre es un indicio que hay una infección aunque ciertos tumores cerebrales también pueden alterar la temperatura. No se debe ignorar la aparición de fiebre cuando es frecuente, por ejemplo más de un día, y cuando supera los 38 °C.
Frecuencia cardíaca:

Se conoce como frecuencia cardíaca o pulso la cantidad de veces que el corazón late. Esto se debe a las contracciones del músculo cardíaco. Los valores normales difieren de una persona a otra dependiendo de factores como la edad, el género, la alimentación, el estilo de vida, entre otros, de este modo se considera que el pulso cardíaco normal en un adulto es de 60 a 100 pulsaciones por minuto. Pero este valor puede verse alterado por factores como la actividad física, la ingesta de ciertos alimentos que contenga cafeína, y algunas drogas.
Una taquicardia se considera cuando los latidos del corazón son superiores a 100 y bradicardia cuando los latidos son inferiores a 60.
Frecuencia respiratoria:

Es la cantidad de veces que se respira durante un minuto. La respiración es el intercambio gaseoso: inhalación de oxígeno y exhalación de dióxido de carbono. La respiración en un adulto es de 15 a 20 respiraciones por minuto pero estos valores varian de acuerdo a la edad, género, y actividad física o enfermedad, como la EPOC, e incluso durante el sueño.
Presión arterial:

La sangre que circula por las arterias ejerce una presión sobre las paredes estas, dicha fuerza se conoce como presión arterial o tensión arterial. Cuando la sangre es enviada por las arterias mediante la contracción de los ventrículos se le llama sístole y va de 100 a 140 mmHg (mililitros de mercurio), y cuando el corazón está en reposo es decir se está llenando se le llama diástole y van de 60 a 90 mmHg en adultos. Cuando estos valores son superiores se conoce como hipertensión arterial, y cuando son inferiores se conoce como hipotensión.
Las bebidas calientes, la cafeína, algunos medicamentos, el estrés, la actividad física, la ingesta excesiva de sal o las grasas contribuyen a aumentar la presión arterial.
La cefalea es un síntoma característico de una posible hipertensión, el mareo o la palidez son posibles síntomas de hipotensión.
La presión arterial se mide con un tensiómetro digital o manual.
Consideraciones de enfermería:
La toma, registro y supervisión de signos vitales es una actividad de enfermería y esta conlleva una serie de actitudes y recomendaciones que se debe tener en cuenta a la hora de tomarlo. Las consideraciones que mencionaremos a continuación son generales para todos los signos vitales, en otro artículo mencionaremos las recomendaciones de cada una.
Las consideraciones son:
- El paciente debe estar reposado, si acaba de llegar al centro asistencial se le pide que se repose por 20 minutos.
- Informarle al paciente el procedimiento y la importancia del mismo.
- Verificar que los equipos (termómetro, tensiómetro) estén en buenas condiciones.
- Revisar que las áreas donde se le tomará los signos vitales no tenga lesiones ni afecciones.
- Registrar en la hoja de signos vitales y en las notas de enfermería.
- Reportar al médico en caso de observar anomalías y registrarla en la notas de enfermería
- Tomar los signos vitales con frecuencia o según recomendación médica.
Nota importante: no pasar por alto cualquier resultado que pueda considerarse relevante e informar al médico. Es mejor pecar por exceso que pecar por omisión.
Eso es muy cierto,…
«Nota importante: no pasar por alto cualquier resultado que pueda considerarse relevante e informar al médico. Es mejor pecar por exceso que pecar por omisión. »
Sobre todo en los actuales momentos hay que prevenir porque pueden sumarse síntomas y males.
Interesante referencia.
Es correcto. Es muy importante así se previene una posible complicación en el paciente.